sábado, 9 de enero de 2010

reflexión personal de la educación social como profesión



En muchas ocasiones he pensado en cómo sería mi trabajo, en si daría la talla como profesional, en lo que pudiera influirme en mi vida personal…

La considero una profesión dura ya que el hecho cotidiano y rutinario es el enfrentamiento ante problemas humanos, a necesidades…pero a la vez es gratificante porque no todo el mundo puede decir que ha hecho cambiar la vida de los demás o al menos ha influenciado para ello.
Y ésta es la clave para mí: Trabajamos para la gente, con la gente y por la gente. No nos movemos por máquinas, no somos parte de un montaje en cadena de cualquier fábrica, no trabajamos con números de serie ni nuestro fiel compañero es un taco de papeles encima de una mesa de oficina…Trabajamos con sentimientos, problemas, emociones, carencias, niños, jóvenes, adultos, mayores, ricos, pobres, trabajadores, jubilados, de todas las razas y culturas posibles… ¡nuestro campo parece no tener fin!

Es una profesión difícil pero bonita, dura pero gratificante.

Y es que ya lo dijo uno de los descubridores más grande que conocemos:
“Encuentra la felicidad en tu trabajo o nunca serás feliz” Colón

No sé, pero siempre suelo escuchar de la gente que mejor me conoce que soy algo utópica por no decir bastante utópica. Pienso que es muy fácil quedarse quieto e impasivo hacia las cosas que suceden en tu alrededor.

Gracias a gente como María Teresa de Calcuta, Gandi o Martin Luther King...(cada uno en su estilo) se ha progresado socialmente. En sus épocas, gracias a ellos se dieron pasos agigantados relacionados con todo lo social.
Ellos también serían utópicos en su momento, pero por sus labores humanitarias, por sus reclamaciones, fuerza y coraje consiguieron que en la actualidad se siga el camino que ellos un día comenzaron y que por lo tanto se siga luchando por lo que un día defendieron.
Me pregunto porqué no existen más personas como ellos al menos que se interesaran por el mundo la mitad de lo que lo hicieron estas personalidades ya que al fin y al cabo lo construimos nosotros con nuestras acciones, con nuestros hechos.

¿Es la gente que tiene una venda en los ojos y no ve lo que ocurre en el mundo o gente sin venda pero sordos o yo estoy loca?
Quizás yo vea demasiadas cosas en donde la gente no ve nada, quizás haga de un grano de arena un mundo, o quizás este mismo mundo se encuentre al revés y piense con los pies…

Nelson Mandela en cierta ocasión pronunció la siguiente frase:
“Después de escalar una montaña muy alta, descubrimos que hay otras muchas montañas por escalar”
Y es totalmente cierto, hemos visto muchas necesidades, injusticias, muchos problemas sin resolver…poquito a poco se van solucionando cosas, proponiendo alternativas…pero nos damos cuenta que algo falla, no sé si en el Estado o si en la propia medida, nos damos cuenta de que queda mucho por hacer, muchos objetivos que alcanzar, muchas metas que conseguir, muchos esfuerzos…

Y el arma más fuerte para todo ello no es la política, ni lo son las leyes, es la educación.
La educación rompe barreras y une a las personas. Es la que abre numerosos caminos para andar, para mirar hacia delante.

No se porqué los hombres se empeñan en hacer barreras, fronteras entre unos y otros.
D. Pire pronunció las siguientes palabras:
“Andaríamos mejor si no fuera porque hemos construido demasiados muros y no suficientes puentes”
Y esto es lo que necesitamos, puentes para acercar a las personas, para acercar costumbres, tradiciones, culturas, para acercar colores, sentimientos y emociones…

Y vuelvo al principio: Esta profesión trata de todo esto, de construir puentes, de hacer todo lo posible para derribar barreras, para borrar fronteras…
Alguien me dijo que en este trabajo es imposible no implicarse demasiado, es imposible no salpicarte de las alegrías y de las penas de los demás.

Por supuesto no deja de ser un trabajo en la que cuando termina la jornada laboral te vas a tu casa con los tuyos, pero sí es cierto que como en otras tantas profesiones corres el riesgo de llevarte los problemas a casa (psicólogos…)
Por eso es tan importante saber separar, conocer el límite de lo que es tu trabajo y tu vida personal pero claro no es tan fácil

Supongo que esto se aprenderá a base de experiencias y de algún que otro error por implicarse demasiado.

Pienso que lo que nunca hay que perder, lo que siempre te debe acompañar en este trabajo y en todos es el optimismo, el saber mirar hacia delante y el hacer caminar a los demás.
Y es que como dijo Mario Sarmiento “El buen humor resuelve dificultades y prolonga la vida”

1 comentario:

  1. He leido en el Blog de un compañero tuyo
    "Educa a los niños de hoy para no tener que castigar a los hombres de mañana"

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